Historia del origen de KKIS
¿Tuviste un profesor que realmente "te entendió"? ¿Un profesor que viera tu singularidad, te animara a desarrollar tus habilidades y te inspirara para dar lo mejor de ti mismo?
Gayle Collins, fundadora de Keeping Kids In School, era esa profesora.
Dicen que una vez que se es profesor, siempre se será profesor: incluso después de las aulas, el deseo de ayudar a los niños a desarrollar su potencial está siempre presente.
En 2011, recién jubilada y recién mudada a Playa del Carmen, Gayle se interesó por entender cómo funcionaban las escuelas públicas en México.
Fue en diciembre cuando se hizo amiga de una de las pocas profesoras anglófonas de la escuela pública, que le explicó la grave situación económica por la que atraviesan las familias de sus alumnos y cómo en Navidad necesitaban material escolar, no juguetes, para sus alumnos.
Educación en Playa
Playa del Carmen es una ciudad de más de 300.000 habitantes donde el trabajador medio gana unos 8 dólares estadounidenses al día. Los estudiantes de primaria necesitan lo básico, como transportadores, lápices de colores, cuadernos y una mochila para guardar sus útiles.
Los estudiantes de secundaria necesitan aún más ayuda. Para los estudiantes de 10 a 12 años, hay costes asociados a la matrícula, los libros, los uniformes y el transporte. Cosas que en Estados Unidos y Canadá damos por sentadas. En resumen: la educación secundaria no es gratuita. La carga de una educación pública recae en la familia.
Gayle habló con otras personas que se asombraron de que los salarios sean tan bajos que a menudo los padres se ven obligados a dar prioridad a la supervivencia y por eso animan a sus hijos a trabajar en lugar de ir a la escuela.
Con su floreciente industria turística, Playa del Carmen ha experimentado un enorme aumento de población en los últimos 20 años: de 44.000 habitantes en 2000 a 305.000 en 2020.
Una comunidad en crecimiento
¡KKIS también ha crecido! En 2012, KKIS entregó material escolar a 258 niños. En 2021, 1.922 niños recibieron material escolar, 70 adolescentes recibieron becas de bachillerato y 23 becarios de bachillerato de KKIS obtuvieron becas universitarias.
El compromiso y la visión de Gayle fueron contagiosos desde el principio. En su primer esfuerzo de recaudación de fondos, ella y sus amigos reunieron dinero suficiente para dar a TODOS los niños de esa escuela local material escolar (en lugar de juguetes) para Navidad.
Poco después, Gayle compartió su visión con Kelly Caldwell, una gestora del cambio que acababa de jubilarse tras 21 años de carrera en el sector bancario. Kelly aportó su experiencia en gestión de programas y, junto con su marido mexicano, fue capaz de poner en contacto a KKIS con empresas locales a las que les encantaba la idea de ayudar a que más niños siguieran yendo a la escuela.
Más voluntarios ofrecieron su ayuda y el Proyecto KKIS siguió adelante aprendiendo de los niños de Playa del Carmen y ayudándoles. Un voluntario cuyo servicio destacó fue Fred Uriarte, un ejecutivo aeroespacial recién jubilado. Fred creció en un hogar bicultural en Los Ángeles, Ca. con 7 hermanos y padres mexicanos que valoraban la educación. Fred conoció de primera mano el valor de la educación y en su jubilación le apasiona la idea de ayudar a los niños no sólo a cambiar sus propias vidas, sino también las de sus familias y su comunidad.
Fred es ahora Presidente de la Junta Directiva del Proyecto KKIS y le acompañan otros 6 voluntarios comprometidos y con talento que juntos guían a la organización en su misión de mejorar los índices de graduación y cambiar la vida de los niños a través de la educación.
La educación cambia vidas
El proyecto KKIS nació de la idea de que todos los niños tienen derecho a una educación y merecen alcanzar su potencial.
Cuando una madre soltera de 5 hijos ya no tiene que decidir a qué niño puede matricular en la escuela primaria, ella y sus hijos ganan.
Cuando un padre ya no tiene que decir a su hijo adolescente: "Hijo, siento lo de tus sueños, pero la familia necesita que trabajes", él y toda su familia ganan.
Suministros para el éxito
Con un simple conjunto de herramientas de aprendizaje, y la oportunidad de completar 12 años de educación básica, los niños tienen la oportunidad de cambiar sus vidas y las de sus familias, el cambio puede ser generacional.
Un año de material escolar para una familia con 5 hijos cuesta 0,28 céntimos de euro al día, 100 dólares al año, o 20 dólares por niño.
Puedes ver por qué ayudar a estos niños es importante. Desde su creación, KKIS ha entregado material escolar a más de 13.000 estudiantes y ha concedido 344 becas anuales de bachillerato y 44 de universidad. Su tasa de graduación es del 86%, frente a la media federal del 30%.
Actualmente, KKIS patrocina a 70 estudiantes de secundaria y 23 universitarios.
Asombroso, ¿verdad?
La visión del Proyecto KKIS es: Todos los niños merecen una educación.
¿Preparado para pasar a la acción?
Aunque en México son obligatorios 12 años de educación, la media es de sólo 9 años. Los estudiantes que quieren cursar el bachillerato tienen que pagar un examen de ingreso, las tasas escolares, el transporte y los gastos de uniforme. Creemos en la educación pública. No es un sistema perfecto en ningún país, pero creemos que todos los niños deberían tener acceso a 12 años de educación.
La buena noticia es que mantener a un estudiante en el instituto cuesta menos de 2 USD al día.
Si eres como nosotros, estarás de acuerdo en que gran parte de por qué nos encanta Playa del Carmen tiene que ver con los increíbles lugareños. Así que ¿por qué no hacer algo por la comunidad a cambio?
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